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Sentimientos

Esperandola….

Esto me parece que ya paso años atrás en mi vida. Me llevaba bien con una chica que conocía a través de MSN y sin quererlo (o queriendolo??) me volcaba con ella. Pasaba largas y apasionantes horas de charla y lo pasaba mejor incluso que con muchas personas de las que suelo tener a mi lado.
En la anterior ocasión que me ocurrió todo fue muy bien aunque luego esta persona me hizo mucho daño y me juré que no volvería a hacerlo. ¿Y direis hacer que? Pues volcarme con una persona de esa manera, llegando hasta el punto de mirar en mis ratos ociosos (y menos ociosos) cada dos por tres el MSN a ver si conecta y poder, aunque sólo sea, intercambiar un rápido saludo, con eso me basta.
Hoy llevo 2 días sin leerla y la echo de menos 🙁 Sé que hoy tampoco la leeré pero ¿que le vamos a hacer? ¿Por qué el destino es tan injusto que con personas que te puedes llevar tan bien te las planta en la lejania? o ¿Será que dicha lejania es la que provoca que no haya roces en una relación y por tanto tienda todo a ir bien?
Muchas preguntas asaltan mi mente. ¿Qué es este sentimiento tan raro que tengo dentro? ¿Es esto bueno doctor?

8 respuestas a «Esperandola….»

juer Moi, a mí me ha pasado más o menos igual en varias ocasiones (y me sigue pasando), aunque no siempre ha habido distancia. si aprendes a llevarlo bien no es malo, el problema es cuando dejas de hacer otras cosas sólo por mirar el msn y se convierte en una obsesión.

yo, más que la lejanía creo que es por la frialdad del método (por muchos iconos y todo eso no deja de ser frío) lo que hace que no haya roces, además de que como tienes que pensar para escribir, no es como en la comunicación hablada que una vez lo sueltas ya la has cagado.

¿qué es el sentimiento? eso lo dejo para tí 😛

ánimo y no te obsesiones 😉

No Ale, gracias a dios no se ha convertido todavia en una obsesión (no diré que no se convertirá pq nadie sabe lo que pasará en el futuro). Simplemente con esta entrada planteaba una de las cosas en la que piensa a veces mi cabecita y a la cual creo que la gente podría aportar su punto de vista como tu muy bien has hecho.

Eso es muy importante, que no te se convierta en una obsesion, que entonces si que estas jodio, te lo digo por experiencia, yo tuve que eliminarla del mesenger.

moi, no te obsesiones pero no la borres del msn joer, si no que va a hacer ella en esos ratos que pasa contigo???? estoy segura de que a ella tambien le molas tu. un besazo moi. y hazme caso ehh.

Moi, amigo mio. Pase lo que pase te deseo lo mejor y espero que nadie más que haga daño, que bastante has pasao ya.
Ojalá que esas charlas que mantienes con esa persona no sean en vano y te sirvan para mantener, como mínimo, una amistad que te dure para toda la vida, y no una distracción pasajera cuyo principal y único atractivo es la novedad. Te lo digo porque luego es muy triste comprobar que todo era mentira y que esa persona haga como si dejases de existir de buenas a primeras.
Un abrazo y mucha suerte compañero.

La distancia no es ningún problema, lo somos nosotros mismos. Yo conocí a mi mujer hace muchos años, cuando esto de Internet no estaba implantado y el Messenger no se sabía lo que era. Mi mujer estaba en Bilbao y yo en Castellón, y la distancia se hacía dura. Como medio de contacto por aquel entonces usaba el teléfono y la llamaba desde una cabina muy a menudo, con largas charlas en las que hablábamos de todo.
Yo la conocí como persona no con el contacto físico sino con estas charlas a distancia, que es como mejor conoces a una persona. Pero dependió, y sigue dependiendo, de nosotros el que esta relación dure más que estos casi 20 años que nos conocemos.

Si ambos ponéis de vuestra parte la cosa marchará hacia adelante y si no, pues a otra cosa, mariposa 😉

Antes no era habitual viajar y el conocer a gente de fuera del entorno cercano era más bien difícil. Ni qué decir de lo que sucedía ‘más antes’ cuando la gente sólo se relacionaba con los del pueblo de al lado.

Ahora no sólo viajamos mucho más sino que la tecnología nos ha facilitado el viaje virtual así que conocemos o al menos contactamos con gente de cualquier parte del mundo con suma facilidad.

Sin lugar a dudas el tener más posibilidades de cualquier cosa significa que también tenemos más posibilidades de cagarla, pero por ese motivo no nos vamos a limitar a pasear por el pueblo de al lado. Para ganar hay que apostar y el apostar siempre es arriesgado. Si además la apuesta es ‘en relaciones’ pues más complicado todavía porque el perder habitualmente es doloroso. Pero…¿que hacemos? ¿No apostar? ¡¡¡Y un cuerno!!!

Suerte y … hagan juego, señores.

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